Comenzó oficialmente hoy la temporada de lluvias en Kansai, de modo que nos queda por delante un mes de humedad y agua, mucha agua cayendo de un cielo que se ha tornado plomizo. Dicen que será más breve este año, cosa de “la Niña”. Yo odio esta época, especialmente odio eso de manejar la bicicleta con una mano mientras con la otra sostengo el paraguas… Pero es un engorro necesario, crucial para el campo.
Hoy os muestro unas fotos que tienen algo más de un mes, cuando estuve por Kusatsu, en la prefectura de Shiga, justo cuando empezaba la plantación del arroz. Es impresionante caminar entre estos enormes arrozales, que una vez inundados de agua parecen gigantescos espejos colocados sobre la tierra.
Campesino fumigando para dejar bien preparada la tierra antes de la siembra.
Uno de los canales que bordean los arrozales y que traen las aguas del lago Biwa.
El mismo canal desde otro ángulo.
A la caída de la tarde una charla entre vecinos.
Una de las modernas máquinas para plantar el arroz.
El primer arrozal inundado del año.
Realmente parecen espejos vistos desde la lejanía.
Increibles esas plantaciones.
Lo de la humedad en el ambiente es agobiante. Yo me quedo con las temperaturas que hizo a finales de Mayo, fueron estupendas tanto en Tokyo como en Kyoto.
Un saludo.
Aquí en Tokyo parece que empieza ya la temporada de lluvias, pero la humedad que hay desde hace un para de semanas, como dice Wix Rocks, es agobiante.
Muy chulas las fotos, ¡es cierto que parecen espejos los campos de arroz!
¡Saludos!
Mi zona parece ser donde se planta más tarde el arroz en todo Japón. Por los alrededores ya he visto campos inundados, pero aquí por ahora nada.
Las fotos son preciosas, e ilustran perfectamente lo que nos cuentas hoy. Nunca había visto así los campos de arroz, creo que los miraré con otros ojos la próxima vez.
Por cierto, gracias por tu comentario sobre la casi-guitarra Casio. Si me pudieras contar más pegas te lo agradecería mucho, porque hoy puedo ir otra vez a la tienda donde la vi, y todavía no lo tengo muy claro. Probarla claro que la probaré, pero creo que hay cosas de las que yo no me daría cuenta en 2 minutos.
Me encanta el Delta del Ebro por eso. Y ¿sabes cuándo me gusta más? Cuando el arroz está crecido, a puntito para ser recogido y el campo tiene ese olor tan especial de arroz… Un olor intenso que se va metiendo para dentro sin empalagar. Bicos
Ooh, la de la luna es kawaii ^^
Por cierto, Javi, a ti que te gusta tanto la fotografia, acabo de publicar en mi blog una seleccion con fotos nocturnas de Tokio; te lo comento por si te apetece echarlas un vistazo 🙂 Aqui te dejo el enlace permanente:
http://thisisapen.blogsome.com/2007/06/13/cuando-el-sol-se-pone-en-tokio/
Venga un saludo y sigue asi!